Leí esta novela alemana. No sé si existe una traducción al español. El titulo se traduce a impulso, o pulsion, de jugar. El libro ronda las 600 páginas y la historia que cuenta es extensa y ambiciosa. Leerla me llevó algún tiempo, tanto que llegué al final y tenía ganas de volver al principio, a ver como comenzó esto a ver como era este profe de historia. En resumen se puede decir que en ella se narra un año escolar en 2004 en un instituto de elite en la ciudad Bonn en el río Rhein, antigua capital de Alemania oeste siguiendo a a la protagonista Ada que con un otro alumno emprende un juego peligroso con un profesor en el que caben relaciones emocionales desiguales, chantaje, la violencia y sexo. La historia se cuenta desde el punta de vista del proceso judicial que encadena. La autora tiene estudios y ejerce en el ámbito del derecho, escribió esta novela joven, de treintañera. A un nivel meta, el tema central seria el de la generación milenio y la época de la posmodernidad y su influencia o su modo de trascender a nuestros modales culturales, manera de actuar, argumentar, y sentir. La sociedad es un juego, una competición, lo bueno es eficiencia. El lema de Ada es (traducido libremente) “Si todo es un juego, estamos perdidos. Si no, también.” Esta generación de jóvenes que no son ni capaces de fundar una familia ni de identificarse con un partido político.
Los chicos con su juego intentan corroborar la Spieltheorie, la teoría de juego, la teoría de colaboración, miedo de castigo y consecuencias.
Se establecen muchas referencias al hombre sin cualidades de Musil. (Der Mann ohne Eigenschaften: “Ähnlich wie Ulrich hielt Ada sich weniger für ein Einzelwesen als für ein Zeitgeistdestillat.”). La protagonista Ada está convencida de ser menos un individuo que un destilado de su tiempo. Ella y Alev se definen como los bisnietos del nihilismo. La edición francesa está titulada La fille sans qualités.
Para
ellos todo carece de sentido. Los dos son adolescentes premaduros,
superdotados, inteligentes, sabios. Ella además es una deportista de
primera. Sus situaciones familiares están complicados, cosa que
ellos llevan con mucho más pragmatismo y frialdad que sus proprios
padres.
Como en Faber, otra novela contemporánea que leí hace poco, el tema es el de los adolescentes muy inteligentes que no encajan en su
entorno y se ponen a hacer cosas que mejor no hubieran hecho. Me busqué
otro libro de temática de colegio porque algo en mi quiso quedar allí.
Como en Faber, el y la protagonistas leen Dostoievky y Balzac a los 14 años.
Esta proposición me pareció interesante, estoy leyendo muchas novelas que intentan captar la esencia del “presente” y se pueden apreciar ciertas marcas en común y diferencias en las que quiero profundizar en otro lado, también interesante por una razón personal: Ada es de la generación 1988 como yo, también yo frecuentaba un secundario alemán en 2004, me acuerdo de las debates (que eran mucho más básicas en mi caso) sobre la reelección de Gerhard Schroeder, el terrorismo en España y de la invasión de Irak.
El estilo de Zeh es barroco, exuberante. Los adjetivos. los símiles y metáforas en cada segunda frase le dan algo muy vivo, lleno de colores y personalidad, pero es claramente too much. Todos los diálogos son exagerados, poco realistas, hasta anticuados por veces, pero esto es un medio de estilo que aprecio, se pueden explorar efectos interesantes. Pero también entiendo que mucha crítica encaja aquí, cortando aquí y allá podía haber hecho una novela más digerible.
Me gustó mucho, creo que en su historia habla de temas muy importantes aunque a veces exagera un poco, aunque tengo que admitir que también estaba bueno acabarla.