Tender bar es una novela, con sus casi 400 páginas bastante exhaustiva, sobre
un bar, bueno no “solo”, digamos que es una novela sobre la
juventud de JR Moehringer, en la cual un bar tenía una sacra
importancia. Recientemente hecho película por producciones Amazon,
dirigido por George Clooney. No sé bien si llamarlo novela, o
autobiografía, o memoria, o autoficción, no me interesa distinguir
factos y nombres reales de los ficticios. Se sigue su infancia hasta
sus veinti-tantos años – centrándose en él como joven adulto,
allá por el 1988.
Fue traducido como
“El bar de las grandes esperanzas” - el bar en cuestión es donde
crece el chaval.
Es el tipo de libro
que uno lee mejor acompañado de una bebida alcohólica. El Dickens
(de ahí el titulo español) que luego es reformado y rebautizada
Publicans es un bar legendario, casa para muchos hombres que allí
conviven, comen, beben, hacen llamadas, curan sus tristezas, festejan
sus alegrías, una constante durante muchos años. Su tío Charly,
principal bar tender (camarero), y su dueño Steve, y también muchos
otros personajes de allí devienen figuras de padre para JR cuando
este es aún un niño. JR (se escribe sin puntos) es un poco un
anti-héroe, aunque no del todo, quizás ese sea el mejor tono para
escribir en primera persona. JR es un joven culto, encontramos
referencias a muchos escritores y poetas clásicos, Fitzgeralds Great
Gatsby, Yeats, Dickens, Hemingway. también al mundo de baseball. El
bar es donde aprende sobre la masculinidad, cómo cuidar bien a su
madre, saber beber, usar palabras, tener amigos y trabajar.
Me gustó, me gustó
incluso bastante, es un poco una historia del sueño americano
personal, no en el sentido de hacerse rico y expandir, pero en el de
la persecución de la felicidad y realización plena de uno mismo, un
poco al estilo de la serie Gilmore Girls que devoraba en la tele cuando era adolescente, chico, hijo de madre soltera
consigue con mucho esfuerzo superar sus miedos entrar a la
universidad privada de elite, Yale, y a pesar de ser calificado por
profesiones más prestigiosas, elige ser periodista y después
escritor de memorias.
Iba a escribir que
es bueno sin más, pero al final sí me emocionó, me convenció.
Me encuentro otra
vez recorriendo digitalmente mapas New York a y Long Island y New
Haven en Google maps. Lo dije muchas veces como la me sorprende
cuantas obras norteamericanas leo últimamente y como me es ya
familiar esta zona a pesar de nunca haber estado ni conocer a nadie
de allí.
Tiene un epílogo
triste, donde cuenta como cerró el bar, más o menos que fue de cada
uno – son muhísimos personajes - y cómo pasó la semana del 11
de setiembre. Es esta parte triste un hermoso contrapunto al resto
del libro y lo hace valer la pena aún más.
Lo único otro que
me molestó un poquito fue la linealidad de la narración, no hay,
casi, flashbacks, o cambios de perspectiva. Mi mayor punto de crítica
es el gran lugar que ocupan sus dudas, la falta de confianza en si
mismo, el eterno duelo por su primer amor y la sensación de vacío
por crecer sin padre. Todo eso puede ser verdad, pero como lectora me
pareció repetitivo y un poco banal, ya que todos sentimos eso, será
una cuestión de estilo, porque es más interesante leer después las
partes de cómo se supera y avanza.
Vi la película,
tiene muy buenas imágenes pero se simplificó y recortó la historia por la mitad (o
más!) dejando fuera mucho de la gracia de la historia.