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13 abril, 2015

Sergio Olguín - La fragilidad de los cuerpos (2012)



Cuantas veces camino a la escuela o por ahí el tren estaba con demoras a causa de un "accidente"? - fue con bastante regularidad. Y cada vez con los compañeros nos imaginamos, con la fantasía juvenil exuberante, como debe de ser cuando la cabina del conductor se llena de sangre y después los de la ambulancia juntan lo que queda del cadaver. Ahora Sergio Olguín escribió la novela sobre el tema.
Hace poco leí Lanús del mismo autor. Me gustó y porque muchas veces es interesante ver como los autores se desarollan ahora me puse con ganas a leer "La fragilidad de los cuerpos" que salió 10 años más tarde y lo tengo en español argentino.
Buenos Aires. Verónica está preparado una noticia al parecer insignificante, se trata de el suicidio de un maquinista de la línea ferroviaria de Sarmiento. Como buena novela negra clasica empieza con que la protagonista que es periodista e investigadora va al funeral del difunto. De a poco descubre una historia de abuso, en la que los conductores de trenes solo son unas víctimas más. Me gustó que fuera una periodista - igual que el autor- y no policía. El libro salió justo un poco antes de la tragedia del tren de Once, no sé si eso fue favorable para su difución o no, es triste. 
Después tiene que ver con el futbol también, como tal vez cada novela argentina y no falta la historia tonta de amor, un libro que parece película. Y como la otra novela también me hizo acordar de Eduardo Sacheri.  Serán amigos los autores?
La fragilidad.. es una novela argentina, dentro de todo agradable, con supenso y humor, fácil de digerir, entretenida. Siento que es un poco demasiado liso, no flojo, pero que le falta un poco de perfil al estilo. Es un poco feo que el lector sepa más que la protagonista, queda previsible. Siento que el autor si se pone un poco las pilas puede llegar a escribir muy bien, pero lamentablemente no lo hace. Lo mismo sentí con su otra novela, Lanús, pero aquí, en La fragilidad de los cuerpos la historia contada me parece más trabajada, un poco mejor que la otra. Me gusta como retrata a los chicos, que aparecen como personas completas con problemas serias y no, como muchas veces pasa, como personajes con limitada percepción o habilidad. 
Recomiendo la lectura, me gustó el tema, a pesar de que se me hizo un poco largo por el medio, sobre todo cuando todo el tiempo pasa la misma escena dos veces de perspectivas distintas, como si el lector no se lo pudiera imagina - yo le quitaría unos 100 páginas de pormedio. Pero hay que aguantar, que el final de la novela vale la pena. Dentro de todo pienso que esta bastante bien.


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