Quizás no queda mucho que decir sobre este libro, es tan conocido y ampliamente apreciado, se lee en las escuelas, y quien no lo leyó sabe de qué va. Es una de las distopías más importantes del siglo XX y representa junto a El mundo feliz de Aldous Huxley (1932) una versión de los posibles caminos que podría tomar la sociedad pos-segunda guerra mundial.
Me sorprendió lo oscura que es la historia. El escritor indaga a fundo en cuanta tortura es preciso para corromper a un hombre (yo acá pienso que se quebraría con mucho menos) y para quebrar su identidad, voluntad y consciencia completamente. Me costó leerla hasta el final, no me parece una lectura nada fácil pues toda la parte final es desgarrador. Es un poquito previsible, pero creo que vale la pena, a veces la literatura tiene que doler.
Los dos escritores, Huxley y Orwell evocaron sociedades futuras que hoy - aproximadamente 70-80 años en el futuro - nos asombran por ser modelos con alguna semejanza a lo que efectivamente se tornó realidad. No literalmente, esto seria una exageración, pero en muchos detalles y lógicas sí encontramos que sus previsiones y advertencias están fundamentados. A su manera, los dos hablan de alienación y totalitarismo y no es solo una imagen de la amenaza del comunismo soviético como algunos lo quieren poner. Se suelen postular como opuestos, la de Huxley la sociedad del placer y del hedonismo y la de Orwell como la de autoritarismo, represión, odio y escasez artificial. Las emociones se gestionan con la droga soma o con sesiones de "two minutes hate" respectivamente. Brainwashing y condicionamiento con slogans e industria cultural hay en las dos distopías. En la novela de Orwell las guerras continúan pero de manera muy diferente, así la guerra no amenaza la existencia del estado, pero sirve como escusa para limitar acceso a los bienes para los ciudadanos.
Ambos son historias de rebelión ("follow the small rules so you can break the big") contra los sistemas totalitarios, sistemas en que no es fácil rebelarse porque están muy controlados, tanto físicamente como en los pensamientos que los sistemas indoctrinan y permiten. En las dos novelas el amor y la familia son problematizados. También se las puede leer como ensayos políticos que analizan las lógicas de diferentes ideologías, del afán de juntar poder como fin en si mismo, el comportamiento de clases sociales y desarrollo de la tecnología. El capitulo IX de 1989 es una larga reflexión sobre la razón del estado relativo al poder, al bienestar/riquezas y la función de la guerra en la sociedad jerarquizada.
En 1989 no hay leyes, pero hay Ministerios: el Minitrue: Ministry of Thruth = Ministerio de Bellas Artes, Entretenimiento y noticias el Miniluv: Ministery of Love = Ministerio de la Guerra y el Miniplen: Ministery of Plenty = Ministerio de Economía. El protagonista trabaja en el Ministerio que se encarga de modificar, o de actualizar la memoria. A veces simplemente se borra, así como se borra y apaga toda la información perteneciente a personas fallecidas, vaporizing. Para contribuir con un ejemplo personal y quizás banal, cuando hace unos meses el sr. facebook inesperadamente me bloqueó mi cuenta me di cuenta de que en todo lo que es el mundo de Internet me pueden apagar as memorias y listas de contacto sin "proceso judicial" y sin dejar rastro de un segundo a otro. Hay telescreens imaginados por Orwell que son como los televisores que tenemos hoy (vease Black mirrow etc.) en día, emiten, pero también tienen cámaras para registrar y así vigilar a la población de forma personalizada. En general, la tecnología es más avanzada y más al servicio de los ciudadanos en la novela Huxley de que en la de Orwell. Existe también la complementar cultura de denuncia con niños espías y Thought Police. En Brave new world las clases sociales están ordenados de ABDC; en 1989 se confronta la gente del gobierno (inner circle and outer circle) versus los "proles" que son basicamente unos felices idiotas. En Brave new world Henry Ford es venerado como un dios, en 1989 es el ficticio Big brother que funciona como líder virtual omnisciente y omnipotente y cuja cara con bigote adorna los pósters y campañas del Estado. Analogamente existe la personalización del enemigo del pueblo, Goldstein, un judío revolucionario que escribió un misterioso libro. En 1989 no hay libros otros que los que escribe el gobierno, como las canciones se hacen con la tecnología de una novel writing machine y un versificador y un caleidoscopio que junta frases al azar y torna las obras en éxitos de venta - lejos de la realidad del 2018? vean este ejemplo real. Sin embargo escribir y amar parecen ser las únicas maneras de defender la propria sanidad y lucidez. Además de una introducción muy buena de Thomas Pynchon, la edición de Penguin viene con Appendix sobre los principios de Newspeak. Sin duda cada sociedad construye y modifica su lenguaje. También pienso que lenguaje inventado por Orwell se parece al twitter, hoy en día plataforma de comunicación predilecta para presidentes, en el sentido de que el vocabulario se reduce, o a alternative facts o fakenews. Hay palabras prohibidas y palabras nuevas, muchas palabras se simplifican. Por ejemplo, ser individualista es un crimen, lo llaman ownlife. Pensar cosas prohibidas se llama crimethink or facecrime. Aquí un excerto:
Me sorprendió lo oscura que es la historia. El escritor indaga a fundo en cuanta tortura es preciso para corromper a un hombre (yo acá pienso que se quebraría con mucho menos) y para quebrar su identidad, voluntad y consciencia completamente. Me costó leerla hasta el final, no me parece una lectura nada fácil pues toda la parte final es desgarrador. Es un poquito previsible, pero creo que vale la pena, a veces la literatura tiene que doler.
Los dos escritores, Huxley y Orwell evocaron sociedades futuras que hoy - aproximadamente 70-80 años en el futuro - nos asombran por ser modelos con alguna semejanza a lo que efectivamente se tornó realidad. No literalmente, esto seria una exageración, pero en muchos detalles y lógicas sí encontramos que sus previsiones y advertencias están fundamentados. A su manera, los dos hablan de alienación y totalitarismo y no es solo una imagen de la amenaza del comunismo soviético como algunos lo quieren poner. Se suelen postular como opuestos, la de Huxley la sociedad del placer y del hedonismo y la de Orwell como la de autoritarismo, represión, odio y escasez artificial. Las emociones se gestionan con la droga soma o con sesiones de "two minutes hate" respectivamente. Brainwashing y condicionamiento con slogans e industria cultural hay en las dos distopías. En la novela de Orwell las guerras continúan pero de manera muy diferente, así la guerra no amenaza la existencia del estado, pero sirve como escusa para limitar acceso a los bienes para los ciudadanos.
Ambos son historias de rebelión ("follow the small rules so you can break the big") contra los sistemas totalitarios, sistemas en que no es fácil rebelarse porque están muy controlados, tanto físicamente como en los pensamientos que los sistemas indoctrinan y permiten. En las dos novelas el amor y la familia son problematizados. También se las puede leer como ensayos políticos que analizan las lógicas de diferentes ideologías, del afán de juntar poder como fin en si mismo, el comportamiento de clases sociales y desarrollo de la tecnología. El capitulo IX de 1989 es una larga reflexión sobre la razón del estado relativo al poder, al bienestar/riquezas y la función de la guerra en la sociedad jerarquizada.
En 1989 no hay leyes, pero hay Ministerios: el Minitrue: Ministry of Thruth = Ministerio de Bellas Artes, Entretenimiento y noticias el Miniluv: Ministery of Love = Ministerio de la Guerra y el Miniplen: Ministery of Plenty = Ministerio de Economía. El protagonista trabaja en el Ministerio que se encarga de modificar, o de actualizar la memoria. A veces simplemente se borra, así como se borra y apaga toda la información perteneciente a personas fallecidas, vaporizing. Para contribuir con un ejemplo personal y quizás banal, cuando hace unos meses el sr. facebook inesperadamente me bloqueó mi cuenta me di cuenta de que en todo lo que es el mundo de Internet me pueden apagar as memorias y listas de contacto sin "proceso judicial" y sin dejar rastro de un segundo a otro. Hay telescreens imaginados por Orwell que son como los televisores que tenemos hoy (vease Black mirrow etc.) en día, emiten, pero también tienen cámaras para registrar y así vigilar a la población de forma personalizada. En general, la tecnología es más avanzada y más al servicio de los ciudadanos en la novela Huxley de que en la de Orwell. Existe también la complementar cultura de denuncia con niños espías y Thought Police. En Brave new world las clases sociales están ordenados de ABDC; en 1989 se confronta la gente del gobierno (inner circle and outer circle) versus los "proles" que son basicamente unos felices idiotas. En Brave new world Henry Ford es venerado como un dios, en 1989 es el ficticio Big brother que funciona como líder virtual omnisciente y omnipotente y cuja cara con bigote adorna los pósters y campañas del Estado. Analogamente existe la personalización del enemigo del pueblo, Goldstein, un judío revolucionario que escribió un misterioso libro. En 1989 no hay libros otros que los que escribe el gobierno, como las canciones se hacen con la tecnología de una novel writing machine y un versificador y un caleidoscopio que junta frases al azar y torna las obras en éxitos de venta - lejos de la realidad del 2018? vean este ejemplo real. Sin embargo escribir y amar parecen ser las únicas maneras de defender la propria sanidad y lucidez. Además de una introducción muy buena de Thomas Pynchon, la edición de Penguin viene con Appendix sobre los principios de Newspeak. Sin duda cada sociedad construye y modifica su lenguaje. También pienso que lenguaje inventado por Orwell se parece al twitter, hoy en día plataforma de comunicación predilecta para presidentes, en el sentido de que el vocabulario se reduce, o a alternative facts o fakenews. Hay palabras prohibidas y palabras nuevas, muchas palabras se simplifican. Por ejemplo, ser individualista es un crimen, lo llaman ownlife. Pensar cosas prohibidas se llama crimethink or facecrime. Aquí un excerto:
"No word in the B vocabulary was ideologically neutral. A great many were euphemisms. Such words, for instance, as joycamp (forced-labour camp) or Minipax (Ministry of Peace, i.e. Ministry of War) meant almost the exact opposite of what they appeared to mean. Some words, on the other hand, displayed a frank and contemptuous understanding of the real nature of Oceanic society. An example was prolefeed, meaning the rubbishy entertainment and spurious news which the Party handed out to the masses. Other words, again, were ambivalent, having the connotation ‘good’ when applied to the Party and ‘bad’ when applied to its enemies."En mi opinión, lo que hace 1989 una novela tan impactante es su psicología. Destacan principios psicológicos del control a través de la "disonancia cognitiva" que es la base del concepto de doublethink. ("Cuando la zorra no consigue alcanzar las uvas, decide que no las quiere"). El concepto fue muy popular en la psicología de los años 50, esto es, después de la novela estar publicada. En el debate de los alternative facts and fake news vale la pena pensar un poco sobre esto y sigo pensando en doublethink, es un principio fascinante, muchas veces subconsciente y al mismo tiempo manipulador y protector de la coherencia de nuestros egos.
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